Muchas Gracias por este estupendo material
Esenciales
Eduardo Falú y Jaime Dávalos son como el cántaro y el agua, como la copla y la baguala, inseparables, inherentes, esenciales.
Dávalos debe venir nomás del ronco tambor de la luna y Falú, del profundo aljibe sonoro, alborotador de sosiegos, que heredó su guitarra del árbol más celeste y recóndito.
Por eso vuelan al unísono sus remolinos eternos y estremecen el alma con esa astilla de tierra que juntos supieron espigarles a las raíces del alma.
Crecieron hacia dentro y nos enseñaron a mirarnos a nosotros mismos.
Anduvieron a lo criollo, sin apuro y sin pausa, con la curiosidad respetuosa, aprehendiendo la pureza y la altura que de la tierra y de los hombres brota. Nos dejaron en su obra la entraña misma de la sencillez profunda, que es el cimiento de lo no perecedero.
Liliana y Juan, con el nivel que les conocemos, realizan esta entrega como una merecida "apacheta" sonora, levantada con los guijarros de las canciones de estos ilustres salteños del mundo, homenaje al que adherimos todos y escuchamos con una sonrisa esperanzada, sabiendo que lo excelente también es popular y ojalá lo sea siempre.
Ramón Navarro
Tomado de su pagina oficial
Un abrazo
corajon